Esapekka Lappi/Janne Ferm y Sébastien Ogier/Julien Ingrassia han tenido sus primeras raciones de kilómetros con el Citroën C3 WRC en estos test, siendo en efecto el comienzo de la pretemporada 2019 para ellos como nuevos pilotos de Citroën Racing. Estas jornadas de test han tenido lugar en la zona sur de Portugal, en concreto en la región de Algarve.
Lappi proviene de Toyota Gazoo Racing mientras que el vigente campeón mundial llega desde M-Sport, habiendo estado ambos dos años en sus antiguos equipos. Aunque para Ogier es un regreso a un equipo en el que ya estuvo (desde su escalada por el JWRC hasta 2011) y conoce al equipo de mecánicos e ingenieros, la forma en la que funciona el C3 WRC es diferente al Ford Fiesta WRC como también es diferente al Toyota Yaris WRC que ha estado llevando Lappi.
Para acabar este 2018, el equipo liderado por Pierre Budar tiene previstos días sobre la tierra del Algarve y acabará en un test de asfalto antes de Navidad, con el que además se empezarán los preparativos para el Rallye de Monte-Carlo. Aún está por confirmarse si serán dos o tres coches los que alinee Citroën, pudiendo ser el tercer coche para alguno de los pilotos que ha llevado en este 2018, Craig Breen o Mads Ostberg.