La FIA ha completado sin problemas la segunda comprobación de la caja de cambios que Sébastien Ogier utilizó en el Rallye de México, tercera prueba del Campeonato Mundial de Rallyes, tal como relata la versión impresa de AutoHebdo. Tras no haber encontrado nada que contravenga la normativa del certamen, el francés mantiene la segunda posición en la prueba (tras el ganador del evento, Kris Meeke) así como el liderato.
El problema en cuestión residía en el peso de la pieza del Fiesta WRC de Ogier, el cual no era el estipulado de la versión homologada por M-Sport meses atrás. Por suerte para todos los miembros de M-Sport, tras el segundo chequeo y comparación con la misma pieza del coche de Ott Tänak, se ha verificado que no hay nada incorrecto en ninguno de los dos coches de Cumbria.
Al final del evento, en el mismo documento de clasificación final del rallye, se observaba que se realizaría más tarde (una vez se volviese a Europa) una comprobación más detenida de la caja de cambios del dorsal número 1. Al mismo tiempo, los otros Ford Fiesta WRC presentes en el evento (los de Ott Tänak, Elfyn Evans y Lorenzo Bertelli) se quedaron más tiempo en el parque cerrado que el resto de coches que participaron en la prueba mexicana.
De este modo, El francés se libra de una penalización que hubiera podido acarrear en una descalificación si los comisarios lo hubieran creído necesario. De este modo, el de Gap lidera el campeonato en un momento que cae en su favor – en el Tour de Córcega, primera prueba de asfalto del año, un asfalto que al menos en la primera etapa estará limpio para él.