Hay una serie de cualidades que caracterizan a todos los campeones de rallyes, los que forman la élite del WRC. No es solo valentía, arrojo, experiencia, trabajo sin cesar, psicología a prueba de bombas, determinación, hambre de éxito…hay mucho más. Incluso teniendo en cuenta el ‘Factor X’ que tienen los pilotos oficiales, son muchas las cualidades ideales de los pilotos, tanto dentro como fuera de pista.
El aspecto psicológico es algo interesante, pues los juegos mentales para desmoralizar al enemigo existen hoy día y han existido siempre. En las declaraciones de los pilotos (y no hay que irse hasta el WRC para ver esto) suele haber ‘recados’ para tratar de diluir la psique del rival, bien para añadir presión y que la probabilidad de que cometa errores sea más alta o para que baje la guardia.
El hecho de que las cosas vayan bien fuera de los tramos, sea en el equipo o su propio ámbito personal y/o familiar, es también determinante. Esto no es exclusivo de los rallyes, pues ya se vio dentro de la Fórmula 1 en la figura de Lewis Hamilton: cuando, en sus años finales con McLaren, pasaba por momentos no muy buenos a nivel personal, en pista no tenía la constancia propia de un campeón mundial, si bien la velocidad innata del británico nunca se puso en duda.
Como dato que resalta el periodista finlandés Miika Wuorela, la estabilidad personal y en el ámbito de pareja son aspectos muy positivos puesto que aunque un rallye resulte perfecto o, por lo contrario, un desastre, siempre tendrá el apoyo de sus seres más queridos. Wuorela señala que, de los pilotos que conforman la clasificación de pilotos antes del Rallye de México de 2019, 5 de los 6 primeros están casados y tienen hijos (salvando, por supuesto, las diferencias socioculturales entre diferentes países en este aspecto además de la situación personal de cada persona).
Esta tranquilidad de tener personas queridas que les apoya de manera incondicional les aporta un plus que les lleva a ir aún más allá, de ser más fuertes a nivel mental en un deporte en el que tener las manos y la cabeza en el sitio correcto marca la diferencia. Por supuesto no es necesario al cien por cien ya que hay pilotos que han llegado a lo más alto sin este apoyo, pero a la hora de competir esta presencia termina siendo una ayuda muy especial.
Llegados a este punto, resulta curioso recordar aquella mítica afirmación de Enzo Ferrari, en la que aseguraba que cuando un piloto tenía un hijo perdía medio segundo por vuelta. Varios de estos pilotos no solo muestran que no se aplica a los rallyes, sino que además ellos mismos también han demostrado ser rápidos en circuitos…