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Luego de una temporada 2016 de notable alto, el piloto británico parte en Monte-Carlo como uno de los cabeza de lista destinados a lograr grandes cosas durante el año. Cierto es que la cita del Principado no es la mejor a la hora de sacar conclusiones entre los distintos vehículos, pero a lo largo de esta pretemporada, muchas miradas se han centrado en la marca francesa de los chevrones.
Con Kris Meeke a la cabeza, el equipo de Matton estrena sobre los helados tramos de los Alpes el nuevo C3 WRC, un vehículo creado a conciencia para volver a la senda de la victoria. Luego de estos años de dominio de VW, la marca francesa espera que su trabajo durante estos meses sea suficiente y puedan estar en la lucha por objetivos grandes ya desde 2017.
"Después de las últimas pruebas no puedo esperar. Esto al fin empieza", confirmaba e propio Meeke al medio rally-magazin. Los buenos resultados del 2016 alientan todavía más a un Meeke con ganas de vencer. Además el propio piloto es consciente de su protagonismo en este inicio de temporada: "Sin duda estaré en el centro de atención, aunque espero poder concentrarme en la conducción", añadía el piloto de Citroën.