Elfyn Evans se ha quedado sin posibilidades de pelear por los puestos de cabeza en el Rallye de México debido a una penalización de cinco minutos por cambiar el motor de su Ford Fiesta WRC. El equipo M-Sport se ha visto obligado a realizar la operación tras detectar problemas durante la sesión de shakedown.
En el shakedown, celebrado durante la tarde del miércoles ocho de marzo, varios equipos estuvieron centrándose en el comportamiento del motor (probando diferentes mapas de motor, por ejemplo) ya que en México, debido a la altura y a la menor concentración de oxígeno, se pierden entre cincuenta y sesenta caballos. Fue entonces cuando M-Sport – que gestiona el Dmack World Rally Team – detectó el problema en la montura del galés.
Los cinco minutos tienen además otro gran problema: puesto que tendrá tal desventaja con el resto de pilotos al final de la primera etapa, es más que probable que en la segunda etapa sea Evans quien tenga que abrir los tramos, tal como menciona el medio francés Rallye-Sport. Este dato hace que conseguir un resultado competitivo sea casi imposible – ahora bien, en Córcega Evans puede dar la sorpresa, dado que es un especialista sobre asfalto.
“Es una gran decepción. Veníamos aquí para pelear por las cinco primeras posiciones y ya desde un principio no tenemos ni una oportunidad. Puede que cambiemos ahora nuestra estrategia y vayamos a marcar buenos tiempos durante la etapa del viernes, que será nuestro mejor día debido a la posición de salida que tenemos”, declaró el piloto del Dmack World Rally Team.