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El Volkswagen Polo GTI WRC, después de varios intentos por recuperarlo tras la caída del imperio de Wolfsburg, se ha quedado sin la homologación necesaria para competir en el Campeonato Mundial de Rallyes. La FIA ha anunciado los constructores oficiales que estarán presentes, dejando fuera el prototipo que durante meses han desarrollado los vigentes campeones del mundo.
Una vez Volkswagen Motorsport decidió abandonar el WRC, varios han sido los intentos por encontrar un equipo privado que financiase la homologación de un coche que estaba desarrollado al completo. Nasser Al-Attiyah ha intentado reunir el apoyo del gobierno de Catar (que controla el diecisiete por ciento del Grupo Volkswagen) pero sus intentos no han dado el fruto deseado.
De este modo, el Ford Fiesta WRC, el Citroën C3 WRC, el Toyota Yaris WRC y el Hyundai i20 Coupé WRC serán los nuevos World Rally Cars que se vean en 2017. El Volkswagen Polo R WRC podría aparecer dentro del Trofeo WRC en caso de que algún participante decida adquirir una unidad (utilizadas hasta ahora por Sébastien Ogier, Jari-Matti Latvala y Andreas Mikkelsen) y competir con ella.
Ahora bien, aunque por ahora está zanjado el asunto del Polo GTI WRC es la FIA la que tiene la última palabra. Esto quiere decir que si en el futuro decidiera cambiar la normativa referente a la homologación, como sugiere el medio Rallye Magazin, el coche podría encontrar el camino de vuelta a los tramos. Volkswagen ha manifestado que está dispuesta a ello ya que supondría incluir el coche en un programa cliente, tal como ocurre con el Golf TCR, el Beetle GRC o el futuro Polo R5.