Tras varios años relegado a un segundo plano entre los R5 por no tener homologación internacional FIA, el Mitsubishi Mirage R5 por fin competirá en una prueba mundialista, el Rallye de Suecia. Ahora bien, lo hará dentro del apartado nacional, dado que la federación sueca de automovilismo le concedió ya años atrás la homologación para correr en pruebas del campeonato sueco, según se puede leer en el medio luso Autosport.
Este coche empezó su desarrollo en 2014 por parte de Mpart AB, un preparador sueco con relación con Mitsubishi, pero el coche no contó con el beneplácito de la marca japonesa – sin ese apoyo, es imposible homologar un coche de la categoría R5. Aunque no esté homologado, este Mirage R5 cuenta con las mismas especificaciones que los otros coches de la categoría: caja de cambios Sadev de cinco marchas, tracción total, suspensiones McPherson y el motor 4B11 que se puede encontrar en un Mitsubishi Lancer Evolution X reducido a 1.600 centímetros cúbicos de cilindrada.
Desde entonces, Mpart AB ha seguido mejorando y actualizando el coche (tanto en términos de potencia como estéticos, teniendo ahora el mismo frontal revisado que los Mirage de calle, conocidos en España como Space Star), teniendo además a pilotos como Jari Ketomaa corriendo a nivel nacional e internacional. Ahora bien, no se espera que esté al mismo nivel que los R5 que corran en el apartado mundialista: su mayor punto débil es que el motor no tiene la misma ‘pegada’ que los de sus rivales, sobre todo en comparación con el Skoda Fabia R5.