Tras varias pruebas duras en las que Citroën parecía que se descolgaba con Ogier en la lucha por el título de pilotos, la marca gala ha dado un golpe sobre la mesa colocando a sus dos pilotos en las primeras posiciones tras sobrevivir con un ritmo superior a las demás marcas en uno de los rallyes más duros de todo el mundial.
Ogier fue claro en la rueda de prensa posterior a la prueba recordando que está victoria era indispensable para volver a la lucha por el campeonato: "Esta victoria era realmente necesaria y nuestra única oportunidad de volver a la lucha por el campeonato. Sabíamos que podía pasar cualquier cosa, porque es un rallye muy duro, pero la mala suerte que tuvimos en la prueba anterior en Alemania quedó atrás".
Este buen resultado también es bueno para la moral de un Lappi que seguramente esperaba más en su primera temporada con un equipo del nivel de Citroën. El finlandés está sufriendo mucho sobre asfalto, pero se espera que vuelva a la lucha en las próximas pruebas del campeonato.