Twitter (@TheDDuran)
Dani Sordo se ha convertido en el piloto de Hyundai Motorsport mejor posicionado en el Rallye de Monte-Carlo. Durante el último tramo de la segunda jornada le ha fallado la dirección asistida de su Hyundai i20 Coupé WRC, pero el cántabro ha podido llegar hasta la meta, terminando quinto de la general.
Con el calor del sol que ha bañado las carreteras alpinas, el hielo impredecible ha dado paso a carreteras donde se alcanzaban los ciento noventa kilómetros por hora. En estas condiciones Sordo ha podido aprovechar más el potencial de su montura, la cual ha funcionado bien durante toda la mañana.
Durante la tarde, el ritmo del cántabro seguía de al mismo nivel, similar al de los pilotos de cabeza: Thierry Neuville y Sébastien Ogier (además, Elfyn Evans estaba marcando buenos tiempos con sus neumáticos Dmack, pero había perdido varios minutos en la segunda jornada). Por desgracia, un error de Neuville hizo que rompiera la suspensión trasera izquierda y se quedara fuera de combate, regalándole una victoria potencial a Ogier.
Poco después, a Sordo le fallaba la dirección asistida: primero le hizo amagos y más tarde, cuando iba rodando con confianza, se partió. Esto le hizo perder un minuto, cayendo en la general por detrás del piloto de Citroën Craig Breen – no obstante, Breen rueda con el DS3 WRC y la diferencia es de apenas quince segundos, por lo que Sordo puede subir a la cuarta plaza para cuando llegue al podio final enfrente del Palacio Real de Mónaco.