El Rallye de Turquía ha sido confirmado como ‘nueva’ prueba para el Campeonato Mundial de Rallyes de 2018, sustituyendo al Rallye de Polonia tras sus graves errores de seguridad. Turquía ya había estado en años anteriores en el calendario del certamen, siendo su última edición en el año 2010.
Según publica el medio Autosport, este nuevo Rallye de Turquía se centrará en la región de Marmaris, situado en la costa sur, una región muy turística capaz de acoger a un gran número de personas. Se realizaría en torno al mes de septiembre, una vez empiece a acabarse la temporada alta para el turismo.
Los organizadores de la prueba han estado negociando con la FIA en varias ocasiones, como en el Rallye de Cataluña de 2016 o el Rallye de Alemania de este año, celebrado apenas unas semanas atrás. El proyecto se ha estado formando durante un buen tiempo, superando a alternativas de otros países como Croacia o Nueva Zelanda – que tenía el plan de situarse justo después del Rallye de Australia aprovechando que todo el material estaría ya en Oceanía.
Ahora bien, ¿por qué Turquía, un país con una situación política compleja y cerca de países como Iraq, Irán o Siria? Los motivos económicos son importantes en este tipo de negocios – no solo ya los recursos que tenga la organización del rallye, sino también los que no pueden asegurar en estos momentos los encargados del Rallye de Nueva Zelanda.
Hay quien admite que preferiría ir a Nueva Zelanda (como es el caso del periodista británico David Evans) pero por lo pronto Turquía es el destino elegido por los mandamases del WRC. Por otro lado está Croacia, pero la organización de este rallye está teniendo problemas para cuadrar sus fechas, lo que le ha lastrado en esta carrera para asegurar su puesto en el mundial.
Además, si bien la situación política (sobre todo por el gobierno de Recep Tayyip Erdogan) no es la ideal – algo que ya comentó Sébastien Ogier a varios medios el año pasado – no se trata de una zona de conflicto. La frontera más cercana está a unos 800 kilómetros en una carretera costera, por lo que son unas cuantas horas de viaje como mínimo.
Ahora bien, ¿cómo sería el rallye en sí? Pues estaría dividido en dos mitades: la primera estaría centrada en la región de Marmaris, que cuenta con carreteras de gravilla fina y suave, por lo que el orden de salida sería un factor clave – ya que los que abran pista van a tener una carretera más sucia y mucho más lenta. Por otro lado, el itinerario propuesto viaja al norte en dirección a la zona de Mugla, siendo carreteras mucho más bastas.
El mayor temor para WRC Promoter es una repetición del desastre que resultó ser el Rallye de China – muy anticipado por las marcas, pero afectado por unas lluvias torrenciales que dañaron las carreteras y rematado por el desinterés político que tenían las autoridades de la zona, llevando a que el WRC no llegara a pisar el país. El caso de Turquía parece ser más serio dados los esfuerzos que se han realizado, además de que el país está más involucrado en el deporte – en el Europeo de Rallyes tienen a varios pilotos apoyados por Castrol, como es el caso de Murat Bostanci o, dentro del Junior U27, Bugra Banaz.