Alberto López: "Llevo muchos años y estoy un poco quemado"

Twitter (@RubenOteroDo)

Mientras la mayoría de equipos preparan el inicio de la temporada 2018 en Galicia, el lucense Alberto López Belón tiene muy claro lo que le deparará esta nueva campaña. En 2017, la fortuna no ha estado de su parte. Aún así, su ritmo en los tramos del certamen gallego ha sido satisfactorio, rozando los puestos más altos en muchas ocasiones y siendo incluso referencia dentro de la Top Ten Pirelli Castrol. 

La temporada empezaba para él en A Coruña, donde un inexplicable doble pinchazo le impidió rematar la faena cuando estaba muy bien posicionado: "En A Coruña en teoría iba a ganar, pincho dos ruedas en la autovía, penalizo y al final termino segundo". En Narón, más de lo mismo: "Después de mucho correr, por la tarde tengo una renta de cuarenta segundos y a falta de un tramo, rompe el turbo". 

Después de esta odisea de infortunios, en el Rallye San Froilán, el piloto local aspiraba a conseguir, al fin, un buen resultado. "Lo hice fatal, un rallye bien entrenado y un buen coche, no fui capaz de luchar en ningún momento por un puesto cabeza, no me ganaron más coches porque no había. Soy una persona sincera y no voy a hablar de reglajes, porque en estas categorías pequeñas, los reglajes están entre las piernas del piloto", aseguraba Belón. 

Aún así, la gota que colmó el vaso, no sucedía en las especiales cronometradas: "Me han llegado cuatro multas del rallye, por lo tanto tengo bien claro que las cestas de Navidad de alguno las he pagado yo y supongo que otros cuatro incautos caerían. La gente se calla pero yo lo digo, en Galicia es una persecución continua contra participantes y aficionados, por suerte no en todas las comunidades es así", confesaba decepcionado el propio piloto. 

"Por otro lado, bien viste en el Rallye da Ulloa, después de que tres tíos hayan gastado un dineral para ser campeones gallegos, al final se decide el campeonato en el despacho de la DGT, porque no tienen suficientes efectivos para multar a la gente", añadía Alberto López. Después de todo lo acontecido en 2017, el veterano piloto lucense ha decidido dar un paso al lado y reducir su programa el próximo año. 

Estará en un par de pruebas, siendo una de ellas el Rallye San Froilán. El objetivo no es otro que hacerlo lo mejor posible, para intentar lograr, al menos, sumar un par de buenos resultados y sacar el mal sabor de boca que le ha dejado esta temporada, especialmente su cita de casa. Para ello, volverá a emplear el Mitsubishi Lancer Evo X que tiene en propiedad desde la pasada temporada.