El piloto de Igualada, habitualmente ya realiza las funciones de “coche 0” en el rallye de su casa, pero en esta ocasión con el Citroën DS3 R5 sube el nivel del vehículo que abre la prueba. Normalmente estas cosas no se ven.
El coche será de su compañero de equipo Eduard Forés, ya que el suyo está en proceso de reconstrucción para tenerlo a punto para el Rallye de Tierra de Auga.
De esta forma Basols podrá rodar ante sus vecinos y amigos como lo suele hacer en este rallye, a la vez que le servirá para desconectar de los últimos kilómetros que realizó en Navarra en el momento del accidente. Todo un lujo para un rallye que cada vez esta cogiendo más fuerza y prestigio en el certamen catalán, como ya lo hizo en años pasados.