Sergio y Diego Vallejo van a hacer los deleites de los aficionados en esta temporada 2018 del Campeonato de España de Rallyes de Tierra con una receta para abrir apetito: dos veces campeones de España de asfalto, un año entero en la tierra y su Porsche 997 GT3 Cup Rallye 2010. Un coche que ruge con mucha más fuerza que cualquier R5 y N5, los coches que en la actualidad están amasando victorias en las dos superficies a nivel nacional.
El origen de la idea surge mucho antes de lo que cabría esperar: el planteamiento empezó cuando la FIA anunció la categoría R-GT para que los Porsche u otros coches (como el Abarth 124 Rallye RGT, que salió más tarde) compitieran más a menudo a nivel internacional, corriendo tanto en pruebas del Europeo de Rallyes como del Mundial. Aunque la idea no cuajó a nivel internacional, llamó la atención de los ‘Lobos de Meira’, firmes defensores del bólido de Stuttgart pese a que tanto en 2016 como a principios de 2017 han corrido con su Citroën DS3 R5 en el Nacional de Asfalto, teniendo como mejores resultados dos segundos puestos en La Nucía y en Madrid en 2016.
Es de sobras conocido que Sergio y Diego ya han estado en años anteriores corriendo la tierra: en concreto en la temporada 2004 (con un Fiat Stilo Abarth) y en 2005 (con un Mitsubishi Lancer Evolution VIII). No obstante, ya en los comienzos, antes incluso de participar en rallyes, ya hacían sus primeros pinitos en caminos de tierra, un preludio de lo que sería una carrera ilustre.
El plan de este 2018 para ellos es, en definitiva, el de disfrutar y hacer disfrutar: un coche con casi 400 caballos y tracción trasera está destinado a ir de lado en las curvas y crear una melodía con sus seis cilindros bóxer, una melodía que va a destacar entre todos los coches del CERT con fuerza. En lo que a resultados se refiere, aún es una incógnita donde estarán los gallegos, si bien no se espera que estén cerca de los R5 y N5 que estarán luchando por la victoria absoluta – pero esta vez se trata más de destacar entre los fans, después de todo.
Según ha contado el propio Diego a este mismo medio, recibirán una ayuda ilustre: la del preparador de Porsche Tuthill, experto tanto en 911 clásicos como en los modernos – sin ir más lejos, François Delecour fue campeón R-GT con un Porsche preparado por ellos. Richard Tuthill considera que los hermanos Vallejo han sido uno de los detonantes de que se crease algo como los R-GT, a partir de la decisión que tomaron en 2007 de competir por primera vez con el Porsche en una época en la que los S1600 aún tenían la voz cantante en nuestro país.
Por tanto, Tuthill estará involucrado en el proceso de desarrollo del Porsche sobre tierra durante toda la temporada junto a la escudería Vallejo Racing. En un principio sólo se verá un Porsche, pero si algún piloto se animase a correr con ellos existe la posibilidad de que se vea a algún bólido más rugiendo por nuestras carreteras – con Tuthill es posible preparar un Porsche para tierra y convertirlo para asfalto (o viceversa) de manera que pueda competir en pruebas diferentes que estén una seguida de otra.
Ver un Porsche en tierra no es nada nuevo, en realidad: nunca se les ha considerado su terreno y, pese a ello, ya se llevaron el Dakar en el 1984 con el 953 (una versión modificada de la serie 930 del 911) y en 1986 la marca alemana consiguió un doblete con los 959. En nuestro país también hay referentes, como Antonio Zanini con su Porsche decorado con los colores de Marlboro o Ramón Pich, que pilotaba por la tierra con su 911 azul de morro plano entre 1984 y 1986 – una imagen que los ‘Lobos’ aún recuerdan de manera lúcida.
Para Sergio y Diego (que en los próximos días disputará el Dakar 2018 junto a Óscar Fuertes) es el turno de trabajar la tierra, una aventura a la que se han vuelto a sumar sus patrocinadores habituales. Aunque vayan a disfrutar (y a animar el CERT, que lleva varios años en auge), no hay que olvidar que también van a estar compitiendo dentro de la categoría de Propulsión, reservada para vehículos de tracción trasera. La continuación de una aventura que comenzó hace ya algunos años con un sencillo 600.