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Luego de un intenso recorrido de promoción, visitando lugares como Fafe (Portugal) o la capital gallega, el Rallye do Cocido ha sido presentado en sociedad hoy mismo. Varios meses de arduo trabajo han quedado atrás, dando paso a la ilusión que precede el inicio de una nueva etapa para la cita del Deza. Este año ‘debuta’ dentro del nacional de asfalto.
Para ello, siendo conscientes de la responsabilidad que conlleva tener en sus tramos el CERA, la Escudería Lalín-Deza ha diseñado un rallye muy cómodo para los espectadores y que a la vez también sea atractivo para todos los participantes. Dos etapas y trece especiales cronometradas serán en las que se repartan los primeros puntos de la temporada.
Los motores comenzarán a rugir ya el viernes. El shakedown y el novedoso tramo de calificación serán los encargados de dar el pistoletazo de salida a un rallye, que tendrá su primer tramo cronometrado también el viernes. Una vez más, la especial urbana de Lalín abrirá el rallye, siendo también, como novedad, la que lo cierre en la tarde-noche del sábado.
Al igual que en 2017, el recinto ferial de la Semana Verde, ubicado en Silleda, será donde se sitúe el parque de asistencias de la prueba, teniendo muy próximo el Concello de Lalín, que servirá de centro neurálgico del rallye. Como no podía ser de otra manera, el Campo da Feira de Lalín será, un año más, el lugar donde se asentará el parque cerrado.
La organización de Lalín ha optado por intentar hacer en 2018 una prueba más compacta, con el objetivo de que la competición no termine tan tarde, como lo venía haciendo durante su andadura dentro del certamen gallego. Por este motivo, la vigésimo cuarta edición del Rallye do Cocido no visitará el ya conocido tramo de Vila de Cruces, dejando la puerta abierta a que sí lo haga de nuevo en el futuro.
En su ausencia, han optado por recuperar la mítica especial de Carballeda –TC9 y TC11. Por otra parte, el tramo de A Estrada-Silleda repite el mismo formato, al igual que sucede con el trazado de O Couto. La imponente cronometrada de Rodeiro, verá recortado su recorrido, manteniendo aún así la dureza que se la ha atribuido durante su bagaje en el rallye.
Un año más, la especial de Saborida será decisiva y por ello la organización le ha querido dar cierto protagonismo. La caravana del rallye transitará por ella hasta en tres ocasiones, siendo la primera pasada –el TC4- la denominada como TC Plus, donde se repartirá una puntuación extra a los equipos que logren conseguir los mejores registros.
Además de la seguridad de los espectadores durante el transcurso de la prueba, algo primordial en este deporte, la Lalín-Deza también ha querido primar por la seguridad de los vecinos. Por este motivo, el personal de la organización gallega transitará por las especiales con el objetivo de evitar los reconocimientos ilegales y velar por el buen uso de los tramos.
A diferencia del campeonato gallego, el CERA no ofrece premios en metálico para los mejor clasificados. Aún así, el Rallye do Cocido ha querido ir un paso más allá y destinar una cuantía presupuestaria para mantener parte de los premios que venía dando en temporadas anteriores, cuando todavía puntuaba para el certamen regional.
Con todo listo sobre el papel, ahora habrá que esperar con ansias a la publicación de la lista de inscritos, para conocer oficialmente como se presenta esta nueva temporada dentro del CERA. Además de los habituales del nacional, la participación local será notable, aportando incluso varios vehículos R5 y R2 a una lista que se avecina de lo más interesante.
