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La Federación Francesa de Automovilismo, en conjunto con M-Sport y uno de sus principales patrocinadores Yacco, ha presentado el vehículo que se utilizará para el Campeonato de Francia Junior para 2017. El modelo utilizado será el Ford Fiesta R2T, unidades idénticas a las que se utilizan en el Drive Dmack Fiesta Trophy dentro del Mundial de Rallyes.
La presentación, realizada durante el Rallye Mont-Blanc, tuvo como principal embajador al piloto de M-Sport en el WRC Eric Camilli. El nicense, que participó en la prueba llevando el volante del coche cero, es uno de los pilotos que la FFSA ha aupado hasta la categoría máxima – como también ha hecho con Sébastien Ogier y Sébastien Loeb en décadas anteriores y hace ahora con otros talentos como Quentin Gilbert o Jordan Berfa.
Los Fiesta R2T estarán presente en los tramos franceses durante al menos tres años, según se comunicó en la presentación del evento – con colaboradores como M-Sport o Michelin, suministrador de neumáticos en todas las escalas de la disciplina. Cada año se disputará un programa mixto de seis pruebas, haciendo acto de presencia tanto en pruebas de asfalto como de tierra.
El premio se ha repartido en dos posibilidades en función de la edad del ganador: si figura entre los veintiséis y los treinta años de edad, podrá competir en el campeonato nacional a los mandos de un R5. Ahora bien, si el ganador cuenta con una edad de entre dieciocho y veinticinco años el premio es aún más jugoso: un programa en la categoría WRC3 con un R2.