Sainz: "Después del intenso trabajo, era de justicia ganar esta carrera"

 Carlos Sainz amplía su leyenda en la Córdoba argentina donde ganó su último rally del Mundial hace ya casi 14 años. Los ojos claros del madrileño ya no son tan secos como lo eran entre el polvo peruano, las lluvias bolivianas y el fesh fesh argentino. En la sierra de Córdoba, la emoción le embarga.

“Ha sido una gran victoria porque, de los que he hecho, ha sido el Dakar más duro, incluidos los dos en Africa que hice. Dar las gracias a toda la gente que me ha apoyado, a Lucas [Cruz, su copiloto], a cada miembro del equipo Peugeot y la confianza que pusieron en mí. Empezamos hace cuatro años este proyecto con dos ruedas motrices para hacerlo ganador. Creo que me merecía esta victoria”, aseguró el español rodeado por un mar de cámaras, miembros de Peugeot y rivales.

“Además aquí gané mi ultimo rally del mundial en estos mismos caminos de Córdoba hace ya unos cuantos años, en 2004.  Para mí está claro que Argentina y Córdoba es algo muy especial”.

Sainz ha ido de más a menos en cuanto a ritmo, pero ha sido ese ejercicio de paciencia necesario el que le ha llevado a ganar su segundo Dakar en tierras argentinas. Lo avisó antes de poner rumbo a Lima y lo ha aplicado.

“Hemos visto que es una carrera que cada día pasaban cosas y que era muy, muy dura. Cada día había sorpresas, trampas. Corrimos bastante en un momento dado y luego ya gestionamos la carrera. No es fácil mantener el ritmo cuando tienes tanta ventaja, a veces cuando vas más despacio puedes cometer errores y cuesta más mantener la concentración porque no estás acostumbrado a ir con tanto cuidado”.


La fortuna, tan esquiva en muchas ocasiones de su carrera deportiva para el español, estuvo de su lado durante estos 15 días, con los errores de los Toyota, Loeb, Despres y Peterhansel y con las complicaciones evitadas por él y Lucas Cruz.

“Hay que tener fortuna en esta carrera. Hemos tenido varios días de riesgo, como el que casi rompimos una correa del alternador. Hay que tener un poco de fortuna, sino es difícil ganar una carrera que dura dos semanas. Hemos estado ahí y cuando ganas con esta ventaja es que has hecho bien el trabajo”.

La despedida de Peugeot no ha tenido el esperado doblete, ni siquiera un francés ha ganado para la marca del león en su última edición del Dakar. Pero Sainz considera que era de justicia que tras cuatro años de duro trabajo, él se apuntase su primer Dakar con los galos.

“Después de todo el trabajo que hemos puesto desde hace cuatro años en este coche, una vez que Peugeot había ganado, era de justicia que yo ganase esta carrera”, reconoce. “Han estado fantásticos. He tenido un coche que ha sido una pasada y quiero agradecerles todo lo que han hecho estos últimos años”.