En la presentación del DAKAR 2016 ASO prometió un nuevo sistema de salida. Una salida en paralelo como la que vimos en el Salar de Uyuni en 2015, pero por orden scratch de las cuatro categorías, es decir, todos los vehículos estarían mezclados y no diferenciados.
Y así lo creímos hasta que algunos pilotos y finalmente la organización lo han explicado con detalle. La salida no será en grupo, sino que se saldrá de uno e uno con una diferencia de 3’ para los pilotos de cabeza. La particularidad es que primero partirán 5 motos, luego 4 coches, una moto, un coche…
Las reglas del juego son las que son y los pilotos las aceptan, pero desafortunadamente Sainz tendrá que abrir más pista que nunca, partiendo a una muy temprana hora y con solo cinco motos por delante, con la particularidad que incluso en dunas, los coches acostumbran a ser más rápidos que las motos, por lo que acabará abriendo pista sin poder seguir ningún tipo de marca sobre el terreno. Lucas Cruz pasará la mayor prueba de fuego que se le pueda poner.
Por detrás, los máximos rivales de Carlos en la general. Nasser Al-Attiyah parte 15’ después que Carlos Sainz, pero lo que realmente asustan son los 36’ entre Carlos y Stephane Peterhansel. Miedo por lo que pueda hacer Peterhansel con el gas a fondo siguiendo a otros pilotos, y la gran minutada que pueda recortar en esta etapa.
De salir en paralelo con Peterhansel, como en Uyuni, Carlos habría conseguido la victoria más importante de todo el Rally. Sin embargo, con esta salida, Carlos ganó la etapa menos idónea, algo difícil de prever cuando la etapa finaliza antes de tiempo sin previo aviso, con un único coche. Un día complicado para especular con el resultado, sin duda.