Carlos Sainz tiene como único objetivo vencer en el Dakar 2018, el último de Peugeot Sport – y el que podría ser el último de su carrera deportiva. El ‘Matador’, que afronta una vez más la prueba con su copiloto Lucas Cruz, fue vencedor en 2010, pero en los últimos años se ha visto obligado a abandonar.
En las dos últimas ediciones ha sido donde se ha visto a un Sainz muy fuerte, empezando por un 2016 donde remontó varias horas perdidas en los primeros compases para colocarse líder en la segunda semana – por desgracia, la caja de cambios de su Peugeot 2008 DKR 16 cedió y tuvo que retirarse. En 2017 lideraba también cuando un accidente en los primeros días hizo que su 3008 DKR rodara colina abajo, dejándole fuera de combate.
“Siempre intento ganar. Esta vez quizás deberíamos ser más pacientes. El año en el que ganamos fue uno de esos que tenía menos etapas. Cuando ganabas una etapa, al día siguiente abrías pista y eso te penalizaba. La estrategia es importante, sobre todo este año. Deberíamos ser más pacientes, que para mí siempre es difícil”, declaró Sainz según Motorsport News.
“Tengo tres compañeros sensacionales, empezando por Loeb y Peterhansel. Peterhansel tiene una experiencia enorme y sabes que siempre va a estar ahí. Y Loeb está en su tercer año y tiene suficiente experiencia como para ganar el Dakar”, aseguró el piloto madrileño.