Aunque los rumores de los últimos días ya apuntaban a que el Grupo PSA (Peugeot/Citroën) se encontraba en negociaciones con otros grupos, y señalaban precisamente a GM como uno de ellos, no había nada seguro. Ahora el Ministro de Trabajo francés ha confirmado esta hipótesis, al afirmar en una emisora de radio que el CEO de PSA le había confirmado estas conversaciones.
Los motivos para llevar a cabo tal alianza son varios, entre los cuales se encuentra el cada día más importante de reducir los costes de producción. Desarrollando componentes de manera conjunta y compartiendo muchos de ellos, ambos grupos conseguirían este objetivo de forma relativamente fácil.
Algo bueno para Peugeot/Citroën, que conseguirían así un socio de envergadura como ya ha hecho su compatriota Renault con Daimler. Y algo bueno también para GM, que vería abierta una nueva ventana para que su filial Opel en Europa recupere los números negros en sus balances. Este uso compartido de componentes posibilitaría algo buscado también por franceses y Opel, cerrar alguna planta de producción.
Mirando un poco más hacia adelante, esta podría ser también una nueva vía para que PSA regresase al mercado norteamericano desde que lo abandonó en 1992. Es una posibilidad aun algo remota, pero para nada descartable en un futuro. Mientras que para el futuro inmediato, GM podría ayudar también a los franceses en su expansión por China, donde los americanos han conseguido un importante asentamiento.
De llegar a producirse el matrimonio lo que parece descartado por el momento es un gran intercambio accionarial, por lo que ambas compañías seguirían manteniendo el control de sus destinos. Algo de especial importancia para los franceses, que evitan así el riesgo de ser canibalizados por el gigante americano.
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