Opel parece haber encontrado la senda adecuada para sus productos con creaciones de gran calidad como el Insignia. Una berlina que ha vuelto a colocar a la marca en una buena posición a los ojos del público, situación que Opel quiere aprovechar.
Según el CEO de la marca, Karl-Friedrich Stracke, se está barajando la posibilidad de dar continuidad por arriba al Insignia, con nuevos modelos que los aproximen a otras marcas posicionadas un peldaño más arriba en el mercado, como Volkswagen. No obstante advierte que este es un camino largo y no resultará fácil.
Aunque no ha dado detalles sobre qué tipo de modelos podrían ser, ya se especula con dos posibilidades. Por un lado un deportivo, que continuase la senda de los Speedster y GT, aunque con una mayor identidad. Y por otro, un gran SUV buscando competir directamente con los Mercedes ML y BMW X5.
Los deseos del CEO de Opel son alentadores para el futuro de la marca, pero no suenan muy convincentes. Opel no está ahora mismo en posición de luchar en el segmento de los grandes SUV contra Mercedes, BMW o Audi, y lo mismo le ocurre en el de los roadster. Cierto es que el propio Stracke ha dicho que este es un camino largo, pero Opel no es una máquina de hacer dinero como Volkswagen y no pueden permitirse el lujo de arriesgarse con este tipo de aventuras.
La única solución que le queda y que posiblemente sería la empleada de acabar emprendiendo este camino, es reutilizar productos de otras marcas del Grupo GM, pero esto tampoco les asegura una buena baza en Europa frente al trío alemán.
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