No ha hecho más que empezar el año y ya tenemos ante nosotros el primer Salón del Automóvil importante, el de Detroit. Como cuna del automóvil americano, el mayor número de novedades que nos esperan proceden de ese país, y empezamos ya con una de ellas, el nuevo Ford Fusion.
Este es el nombre con el que se ha presentado la nueva berlina que Ford va a comercializar de forma global. Pese a que en Europa ya conocemos un Ford Fusion que poco tiene que ver con este, aquella poco atractiva mezcla entre mini monovolumen y todo camino derivada del anterior Fiesta, en Estados Unidos el Fusión es una berlina media, a la cual sustituirá este nuevo modelo cuando llegue al mercado americano a finales de año. También en Europa sustituirá al Mondeo aunque para eso habrá que esperar aún más, hasta mediados de 2013.
Teniendo en cuenta su carácter global y las dificultades que ello implica, hay que reconocer que Ford ha hecho un buen trabajo tanto a nivel estético como mecánico, para llegar a satisfacer los gustos y necesidades de los clientes de medio mundo.
Y es que no hay que echar muchos vistazos a este Ford para darse cuenta de que es un coche bonito, aunque sin muchas novedades. Va a poder plantar cara tanto a los coches americanos, como a los europeos y asiáticos, gracias a un diseño que ha conseguido suavizar la deportiva línea que venían explorando los Fiesta y Focus, dejando a un lado algunas de las exageraciones de este último (como sus enormes pilotos o las aberturas de sus paragolpes) y consiguiendo unas líneas más finas. La nueva parrilla de láminas a lo Aston Martin, los afilados faros (llamadme loco, pero a mí me recuerdan poderosamente a los del Mitsubishi Evo) y el esculpido capó junto con la nueva posición del logo de Ford, van a ser las señas de identidad del modelo. El resto, tanto su parte trasera como su lateral, se parecen bastante al actual Mondeo, aunque ya no parecen dar la sensación de tosquedad que dan en este.
En el interior ha sucedido algo parecido. Hay parentescos con los de Fiesta y Focus, pero ya no te dan ganas de colocar unos neones por todos lados. Tanto miedo debían de tener a pasarse de festivos, que se han quedado a medio camino y no resulta un interior muy deportivo, para tampoco demasiado acogedor. Aunque si se trata de cumplir con todos los mercados, seguramente cumplirá en todas partes.
El otro gran desafío que se planteaba con un coche que debe circular por países donde el precio de los carburantes llega a duplicarse entre unos y otros, era precisamente ese, ofrecer mecánicas para todos los bolsillos. Dejando a un lado las mecánicas diesel, que aún no han sido presentadas pero se da por descontado que las habrá, se puede decir que en Ford han cumplido.
Por un lado, su mercado lo van a satisfacer con mecánicas de gasolina que culminan en un 2.0 EcoBoost de 237 CV (disponible tanto con tracción delantera como integral), junto a un ‘modesto’ 1.6 también EcoBoost de 179 CV. También habrá mercados en los que se ofrecerá el conocido 2.5 litros de 170 CV, que ya carece de sentido existiendo los anteriores.
También para su mercado, pero más todavía por moda que por necesidad, habrá dos variantes ecológicas, Hybrid y Energi, que en Europa si serán mucho mejor acogidas. Ambos cuentan con un motor gasolina de 2.0 litros y de ciclo Atkinson (igual que el del Toyota Prius) que junto a un motor eléctrico, prometen unos consumos aproximados de unos 5,0 litros a los cien. La gran diferencia entre el Hybrid y el Energi, es que este último cuenta con unas baterías de mayor capacidad que además pueden recargarse directamente conectándolas a la red. Un sistema aún más interesante, siempre que su precio inicial no se dispare.
Por lo que se refiere al monocasco, este sigue contando con un esquema de suspensiones McPherson delante mientras que detrás, ha evolucionado hacia un multibrazo. Un claro guiño al mercado europeo, donde no se tiene el suficiente ‘caché’ hasta que no se cuenta con una suspensión multibrazo.
Lógicamente el equipamiento está al nivel de lo que debe tener una berlina media actual, e incluso un compacto. Precisamente el Focus ha incluido algunos sistemas casi inéditos en su segmento, y el Fusion no puede ir por debajo. Control de crucero adaptativo, sistema de advertencia y asistencia al cambio involuntario de carril, ayuda al aparcamiento, control por voz…
Ahora solo queda esperar algo más de un año para verlo por nuestras carreteras, así que te diría que no lo mires demasiado, no vaya a ser que te aburras de él antes de llegar a verlo en directo. Pero de todas formas, te dejo con la galería si no te puedes resistir.
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