350 aforturnados usuarios que pagarán algo así como 60.000€ podrán hacerse con un C30 Polestar, con tracción integral tomada del Volvo V50, y el mismo cinco cilindros sobrealimentado que latía en el corazón del Focus RS500 de Ford, empujando con 400 caballos bajo las cuatro ruedas.
Se convertirá de esta manera en el compacto más rápido del planeta, con una aceleración superior a la del RS3 o del Serie 1 M Coupe, gracias a la combinación de potencia y par bárbaros y el sistema de tracción integral, que además cuenta con diferencial autoblocante posterior.
En cierto modo, este C30 Polestar habrá de servir para plantar cara a coches similares, como el EVO o el WRX STI de Subaru, pero con una orientación "más de circuito".
Sus prestaciones están fuera de toda duda, y su acabado parece que se conservará como en el prototipo, azul eléctrico con interior forrado en piel vuelta, y detalles aerodinámicos funcionales por doquier.
Hemos podido saber del "OK" para la producción en tirada limitada tras estar leyendo durante varios meses negaciones por parte de Volvo en cuanto a las posibilidades de fabricarlo, pero parece que al final se montará esta corta serie limitada a mano en las instalaciones de Polestar a partir de unidades del C30 T5 de serie, a modo de fin de fiesta con el C30, pues en un par de años podría aparecer la próxima generación.
Lo suyo es que Volvo confirmara todo esto en el Salón de Frankfurt, así que atento, a ver si acertamos en la diana. Entre tanto, sonríe, y únete a nosotros en nuestros ruegos para poder poner a prueba el coche cuando salga al mercado.