BMW acaba de reeditar dos de sus modelos más locos y a la vez sugerentes, las versiones M de sus nuevos X5 y X6. El Salón de Los Ángeles es el sitio escogido para su presentación, un lugar ideal para estos majestuosos gigantes, que aunque aquí se venden de forma testimonial, merece la pena conocer.
Los dos nuevos grandes SUV de BMW han optado en esta edición por el continuismo, y en sus variantes M no iba a ser diferente. Bajo su capó sigue reinando el poderoso V8 biturbo de 4.4 litros, que tras una oportuna revisión ha visto aumentar su potencia hasta los 575 CV (+20 CV) y su par máximo hasta los 750 Nm (+70 Nm) entre las 2.200 y las 5.000 rpm. La caja de cambios si es nueva y aunque sigue siendo de convertidor de par, ahora cuenta con 8 relaciones en lugar de 6.
Gracias a tanto poderío, ambos consiguen acelerar de 0 a 100 km/h en 4,2 segundos (un M4 Coupé lo hace en 4,1 s) y alcanzar los 280 km/h de velocidad máxima con el opcional M Drivers Package (de serie se limita a 250 km/h). Como reflejo de la mejora tanto en entrega como en eficiencia, mencionar también que el consumo se ha reducido un 20%, con una media que ahora es de 11,1 l/100 km.
El sistema de tracción total xDrive de BMW es quien gobierna el reparto de fuerza, y lo hace pudiendo enviar hasta un 100% a un solo eje. Además en el trasero se ha instalado el diferencial deportivo Dynamic Performance Control, que distribuye el par entre ambas ruedas de forma independiente. Como en otros modelos M, el control de estabilidad posee un modo M Dynamic Mode que admite ligeros derrapes.
Para dotar a estos monstruos de un guiado más preciso, la suspensión ha sufrido algunas modificaciones (aumento de la caída, soportes más rígidos…) y se han colocado unos muelles más firmes y 10 cm más cortos. El control dinámico de la amortiguación DCC permite variar su comportamiento entre tres modos, mientras que la amortiguación neumática del eje posterior se encarga de regular automáticamente la altura de este.
Con una misión a medio camino entre la estética y la dinámica, aparecen las llantas. De serie se monta un conjunto formado por unas de 20 pulgadas con neumáticos Pirelli P Zero de dimensiones 285/40 R20 delante y 325/35 R20 detrás, mientras que opcionalmente se pueden montar unas forjadas de 21 pulgadas con neumáticos Michelin Pilot Super Sport UHP de igual anchura que los Pirelli.
Y es que la estética es un elemento de especial relevancia en estos SUV deportivos. Por eso se han colocado nuevos faldones con entradas y nervios más acentuados, retrovisores tipo M y las inconfundibles 4 colas de escape. En el interior, unos asientos delanteros deportivos tipo baquet con el logo M, que se repite en otros lugares como cuadro, palanca y volante, recuerdan donde nos encontramos.
Entre el equipamiento se incluye alarma, portón automático, sensores de aparcamiento, navegador conectado, faros LED y Head-up Display, entre otros. Además con la aplicación para smartphones BMW M Laptimer, se pueden registrar datos como aceleración longitudinal y lateral, velocidad, ángulo de giro del volante y posición del acelerador, pudiendo luego visualizarlos en la pantalla del coche y comparar los de diferentes vueltas.
Los precios de uno y otro en el mercado español son los siguientes:
BMW X5 M: 136.900 €
BMW X6 M: 139.900 €