916 CV para el McLaren P1
Se desvela de forma oficial el sistema de propulsión híbrido enchufable de la bestia de Woking
La presentación oficial del McLaren P1 está al caer, y para dosificarla los ingleses acaban de revelar los datos del propulsor híbrido enchufable que monta. Tecnología verde que no está reñida con la máxima deportividad.
Los rumores que apuntaban a unos 900 CV de potencia no iban desencaminados, pues la combinación de ambos motores da un total de 916 CV con un par de 900 Nm. Cifras sobrecogedoras para un coche que anuncia un peso muy contenido.
El motor de combustión es el V8 biturbo de 3.8 litros que monta el MP4-12C, aunque aderezado para la ocasión hasta alcanzar los 737 CV a 7.500 revoluciones y los 720 Nm a 4.000 revoluciones. Suficiente para crear un superdeportivo temible, pero aún hay más.
Siguiendo la evolución natural del automóvil, el P1 no ha querido prescindir de las últimas tecnologías y por eso ha buscado más potencia no con un motor más grande, sino con la ayuda de un propulsor eléctrico. Este consigue sumar otros 179 CV y 260 Nm, enviándolos siempre a las ruedas traseras y siendo gobernados por una transmisión de doble embrague con 7 relaciones.
Las baterías que alimentan al motor eléctrico pesan 96 kg y van colocadas justo detrás de los asientos traseros para que interfieran lo menos posible en el reparto de pesos. Su recarga se produce de la forma habitual, con el propio motor de combustión y la regeneración de energía, aunque también puede conectarse directamente a un enchufe, tardando solo 2 horas en conseguir una carga completa.
Lo normal es que ambos motores funcionen a la vez, aunque también puede forzarse el modo puramente eléctrico con el que según McLaren se pueden recorrer hasta 10 km.
El volante se presenta con dos botones herencia directa de la Fórmula 1. A la derecha está el IPAS (Instant Power Assist System), que aporta de forma instantánea toda la potencia del motor eléctrico. Y a la izquierda el DRS (Drag Reduction System), que reduce la resistencia aerodinámica del alerón trasero un 23% para alcanzar mayores velocidades. Dada la pérdida de apoyo que supone, este sistema se desactiva en cuanto se pisa el freno o se suelta el botón.
Junto con el Ferrari que sustituirá al Enzo, el Salón de Ginebra de este año va a conocer a dos maravillas de la técnica como serán el italiano y este británico.
